¿Es su compañía una empresa perceptiva?
El entorno de digitalización y de cambios disruptivos actual presenta dos grandes implicaciones para las empresas industriales: por un lado, éstas se están viendo forzadas a evolucionar sus modelos de negocio para adaptarse a la nueva realidad; por otro, están influyendo de manera directa en el consumo industrial, haciendo que los clientes industriales exijan los mismos niveles de facilidad, transparencia y servicio que disfrutan como consumidores. A pesar de ello, según un estudio de Accenture, tan sólo el 27% de ejecutivos industriales reconoce haber desarrollado planes para la digitalización y únicamente el 7% cuenta con una estrategia global de compañía a este respecto. Se constata, por tanto, que las organizaciones del sector industrial tienen un largo camino por delante si quieren ser exitosas en un futuro cercano.
Ahora bien, es importante resaltar que, en nuestra experiencia, las compañías que extraen el mayor valor de la digitalización no son aquellas que planifican con detalle, sino las que siguen una hoja de ruta lo suficientemente flexible como para adaptarse a circunstancias cambiantes. Y es que en esta era de cambios disruptivos, la agilidad y el tiempo de respuesta desempeñan un papel fundamental. En Accenture denominamos “empresa perceptiva” a aquella que identifica y responde rápidamente a las necesidades de sus negocios y de sus clientes. El camino para llegar a la visión global que cada empresa industrial haya definido no es único, sino que se desarrolla en el marco de un proceso iterativo donde se avanza por distintos frentes y se van estableciendo aspiraciones intermedias.
¿Cómo lograr una transformación digital siendo una empresa perceptiva? Si bien no existen las recetas mágicas, desde Accenture hemos identificado cinco factores que aceleran la implantación de los programas y contribuyen a su éxito: un business case sólido, basado en un conjunto de casos de uso que permita que el retorno de la inversión sea fácilmente identificable y medible; habilidad para alinear OT e IT, con modelos de gobierno entre ambos bien definidos desde el principio; formación y flexibilización de las plantillas, de manera que los empleados dispongan de habilidades y herramientas necesarias y cuenten con una visión holística de la cadena de valor; implantación de soluciones de seguridad adecuadas para los entornos industriales, para que la seguridad de la información y de la propiedad intelectual queden garantizadas; y, por último, plataformas IoT y ecosistemas digitales, en aras de que el servicio y la experiencia del cliente sean lo realmente importante, en detrimento del foco en lograr un mejor producto.
La supervivencia de las empresas industriales pasa por aprovechar la oportunidad que la transformación digital supone para la creación de valor, entendiendo los cambios derivados de la disrupción digital y adelantándose a las expectativas de los clientes.
Carlos Gallego, managing director de Accenture de los sectores de Industria, Transporte e Infraestructuras, y responsable de Industria 4.0 para España, Portugal e Israel
